Innovation happens everywhere... hasta en el metro de Madrid

Unos meses atrás recibí un correo con el clásico vídeo viral que circula por las lista de amigos y compañeros de trabajo. Se trata de un dúo de artistas canarios (Conciencia Urbana) grabados en el metro de Madrid. Recuerdo que en su momento de hizo sonreír, continué la cadena y ahí quedó como tantos otros vídeos... Hace un par de semanas me los encontré en persona en mi habitual trayecto a Chamartín en metro, y el verlos en directo me hizo pensar en esta entrada de blog.

Pero, ¿qué tienen que ver estos artistas con la innovación? Bien, si te sobran 4 minutos para ver el vídeo o eres uno de los 2 millones de personas que ya lo han visto encontrarás fácilmente la diferencia con otros artistas que has podido escuchar en el metro. En principio el "servicio" que ofrecen todos es el mismo: entretenimiento a cambio de la voluntad. Sin embargo las formas son muy diferentes al igual que los resultados obtenidos por unos u otros. Aquellos que utilizamos el transporte público a diario estamos algo saturados de este tipo de actuaciones y por tanto nuestra respuesta tiende a ser reducida. Sin embargo, pude comprobar como la gente estaba más predispuesta a "buscar la cartera" con este dúo que con el resto que suelo ver.

¿Pero dónde está el secreto? Todos "juegan" con las mismas cartas: guitarra, voz  y un público cautivo (al menos lo que dura un trayecto). La diferencia es que han innovado en la forma de hacerlo, ofrecen "lo mismo" pero de forma muy diferente. Pasan de la canción enlatada a la personalización convirtiendo cada trayecto entre estación en algo único. ¿El resultado? Además de mayores ingresos, gracias al efecto viral del vídeo Pablo Motos los llevó al Hormiguero, Telemadrid les ha entrevistado e incluso alguna consultora les ha incluido en sus cursos de formación (entiendo que como factor extra de motivación).

Esto me lleva al título de esta entrada, la innovación debe estar en todas partes ya que las ganancias que puede aportar son enormes y en ocasiones inesperadas. Aun así, seguimos teniendo problemas con la puesta en práctica de esta idea.

Generalmente asociamos la I+D con grandes centros de investigación, con grandes empresas, tubos de ensayo y batas blancas... hace tiempo que se intentó limpiar esa imagen añadiéndole la "i" de innovación (I+D+i) pero aún así lo seguimos asociando a Sillycon Valley, a Mark Zuckerberg o cualquier otro gurú que ha tenido la "suerte" de topar con una idea brillante y llevarla a cabo exitosamente.

En mi paso por oficinas de transferencia de tecnología en Universidades tanto públicas como privadas observé lo difícil que les resulta a nuestras empresas colaborar con los grupos de investigación de nuestras Universidades. Si eres una Pyme sin capacidad de montar un gran centro de investigación recuerda que muy cerca de ti probablemente lo tengas ya montado y pagado (de hecho lo pagaste con parte de tus impuestos) por lo que te aconsejo que no dudes en contactar con ellos para informarte sobre una posible colaboración. ¿Quieres sacar adelante un proyecto de Big Data (tan de moda en la actualidad) pero no cuentas con el conocimiento necesario? Seguro que encontrarás investigadores que basaron sus tesis doctorales en estos temas y probablemente muy interesados en colaborar contigo. ¿Necesitas desarrollar materiales con capacidades de resistencia especial para alguna aplicación práctica? Igualmente encontrarás grupos de investigación con laboratorios especializados...

Por lo tanto, aunque no seas una gran empresa con una capacidad enorme de inversión en I+D+i siempre puedes acceder a centros de investigación que te pueden facilitar dicha labor, ahora bien, lo que lógicamente no podrán resolver es la aplicación práctica de dichos resultados... eso debe formar parte de la estrategia empresarial que al igual que al dúo Conciencia Urbana te puede aportar una sorprendente ventaja competitiva.

Si te sigue resultando complicado este mundo recuerda que te queda otra forma de introducir la innovación en tu organización, asociada a pequeños cambios que no tienen por qué resultar espectaculares pero que poco a poco mejoran el conjunto. Esta forma, tradicionalmente más asociada al mundo oriental y que los japoneses denominan Kaizen (mejora continua) te permite mantener un ritmo de mejora sostenido en el tiempo. Tanto en EEUU como en Europa nos hemos basado más en los grandes planes de mejora, la tan temida reingeniería de procesos que acostumbra a transformar una empresa cambiando roles y responsabilidades adoquier. Oficinas centralizadas de innovación que consiguen mejorar el rendimiento global de la empresa... siempre que el resto de empleados sigan sus instrucciones al pie de la letra.

En el siguiente post analizaremos cómo el método Kanban puede ayudar a transferir ese poder de dichas oficinas a toda la organización para conseguir ese tan esperado Innovation happens everywhere.